Para que decir que fue publicada en el álbum de 2018 "Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia" y no es pura coincidencia que también la haya publicado en "En la sima" de manera acústica. Para que decir que va uno caminando por la calle cuando se le ocurre un ritmo y lo tararea hasta que llega donde alguien lo saluda y se pierde el ritmo. Para que decir que a veces se encuentra eco en la tecnología y alguien graba el tarareo para darle forma después y la cosa se queda así. A esta canción le pasó ambos. Subiendo por la calle la playa hacía nuestro sitio de encuentro en el "Vicentenario" ─el Vicente le decíamos─ llevaba el tarareo perfecto, pero un saludo al pasar la oriental me desorientó y olvidé hasta qué venía haciendo. Unos días más tarde el tarareo volvió, pero en el mismísimo Vicente y pude hacer que Camilo Zapata, uno de nuestros guitarristas de esa época, lo memorizara, pero con tan mala suerte que olvidé que se lo había hecho memorizar y a él no le importó recordármelo. La tercera fue la vencida y, esperando y creyendo que era la misma melodía, la grabamos en un teléfono inteligente y al día siguiente la recibí en mi correo para darle la forma que hoy conocen ustedes. La idea es básica: La libertad no existe, aunque la busquemos por todas partes y es verdad, la busqué en las ciudades costeras y no encontré un sólo puerto llamado Libertad, pero no se ocupen que si hay varios. En ese momento no los encontré por deficiente mental yo o por problemas de buscador. Para efectos prácticos de la canción, tal puerto no existe porque "Doy una vuelta por América... buscando el Puerto Libertad y nos quedamos con el alma abierta, no hubo un puerto donde atracar... alguien nos jugó una broma... no existe el Puerto Libertad". Tantos años de engaños y de búsquedas inútiles y nadie había puesto sobre el mapa el derrotero para llegar a tan dichoso puerto. "También buscamos en Europa, el reino Unido y Rusia Oriental, en Australia en Indonesia, África, Asia y New Zealand... y nos quedamos de una pieza... no existe el Puerto Libertad" Verdad era absoluta porque si existe un puerto llamado así en esos países ha de llamarse con otro nombre Freedom Harbour o Port liberté... pero nada de "Puerto Libertad" tal cuál dice la canción. Nos engañaron y a la sazón la estrofa final nos dice cual es la manera de hallar ese puerto "No hay remedio y no hay receta... no existe el puerto Libertad. Grita brinca escupe y muerde... pégate a la realidad, Sáltate todas las leyes o márchate hacía altamar, que no hay libertad completa... No existe un Puerto Libertad." La alegoría se completa porque aparte de no existir un puerto Libertad, la única manera de conseguir tal cosa añorada consiste en perdernos en las entrañas del mar donde nadie nos imponga nada y queda explicada tan deliciosa canción que cuando la mostré al grupo, me afirmaron que era imposible usar ese destiempo propio de mis composiciones y demoró bastante en encontrar acomodo entre los músicos y cuando se la mostré a una amiga me dijo: "tan alegre como siempre".
PS: Pero hay Puerto Libertador como municipio de Colombia y a Bolívar le llaman "El Libertador" y existe un Puerto Libertad en el golfo de California en el estado mexicano de Sonora. Tranquilos en ellos tampoco hay libertad. Quede la canción como estaba.
PS 2: Había conseguido Camilo que Piero de Benedictis, por lo menos aceptara hacer la parte inicial de esta precisa canción. Llegó la pandemia y trastocó todo.